Este texto es una cápsula que destaca algunos de los momentos que forjaron el carácter del activista político y ‘poeta rebelde’ de Umbrella House. Un ‘occupied’ desconocido de hace 20 años. Quien fue parte de una revolución que se ganó sin disparar un sólo tiro. Aquella revolución que, junto al Squatter Movement en las marchas de 1992, logró la reivindicación de derechos de un grupo de soñadores marginados. Su contribución a la reconstrucción del sector de la C Avenue en Lower East Side, Manhattan (Nueva York), y su activismo ante el ayuntamiento, la banca, el NYPD y UHAB, son dignos de ser reseñados.Ricardo León Peña Villa (1962, Medellín (Colombia)-2011, Manhattan (USA) “Peregrino del día y ahora, peregrino de la noche sin tiempo, emigrante del vasto territorio del sueño, hondero de palabras ardientes como piedras sacadas del infierno con las que te batiste en combate ante el mundo y su ‘fértil miseria'”.
Es curioso que ‘Richard Lion’, como le gustaba que lo llamaran, muriera el mismo día del devastador tsunami del 11 de Marzo de 2011 en Fukushima, Japón. Lo que tal vez demuestra que los grandes espíritus sincronizan los grandes eventos de su vida (o muerte) con los grandes eventos del macrocosmos humano.
Hoy más que nunca, después de ver la explosión de movimientos sociales, desde los indignados de las plazas de España, que luego se replicaron en muchos de los países occidentales más prósperos. Países que hoy se debaten en problemas que van haciéndose cada vez más grandes, y donde la respuesta lógica, que hasta ahora a sido desatendida por los estados, multinacionales y la banca internacional, que es el hecho de equilibrar mejor la balanza y dejar de asfixiar socioconómicamente a los ciudadanos. Mientras una casta de privilegiados nadan en dinero ganado en muchas ocasiones gracias a la usura, sobre-explotación de recursos naturales, mano de obra barata como sobre-explotación laboral a países del tercer mundo, que a la vez sirven de vertedero de sus desechos industriales y nucleares, y las guerras en sus territorios se sostienen primando los derechos del capital sobre los Derechos Humanos. Ciudades bajo fuego que se vuelven escenarios de prueba de las más alucinantes armas desarrolladas por el complejo militar industrial global. Otra parte del problema es lo que ha producido terremotos económicos, desde la crisis de la Zona Euro que se asemeja a un sofisticado e imponente edificio al que sus cimientos implosionan debido a su propio peso. La burbuja inmobiliaria y la crisis del crédito. El problema del desempleo que azota todo el hemisferio norte y otras zonas del globo. El problema del tráfico de drogas, armas, personas. Monopolios económicos indiscriminados que direccionan las políticas estatales subsidiando campañas políticas. Estos y otros factores han hecho tambalear a Wall Street y otros centros de poder estatal y privado. Se han destapado algunas de las prácticas de manipulación de los mercados de futuros, y un exceso de especulación que configura el más brutal estilo de capitalismo salvaje. Sin contar con una gran parte de la sociedad con actitud descuidada y desinteresada de esos problemas estructurales que nos aquejan.Los ganadores de todos los bandos guardan sus cantidades astronómicas de dinero en paraísos fiscales en varias zonas del globo como Suiza, Hong Kong y varias islas en el Caribe el Atlántico Norte. Muchos de los más ricos del mundo gozan de inexplicables exenciones de impuestos que los gobiernos otorgan a sus emporios económicos. Una conducta plutocrática que sólo consigue engrosar aún más el abultado bolsillo de estos hombres, mujeres y sociedades. El neoliberalismo y el neoconservatismo se debaten entre quienes inducirán a los gobiernos a implantar mayores medidas tecnocráticas que afecten el estilo de vida de la clase media y baja, restringiendo aún más la posibilidad de los pobres de vivir el sueño americano, sueño europeo o sueño hispano. Esta sociedad actual que parece encaminada a un suicidio, más que anunciado. Y es allí donde comprendemos el verdadero valor de personas que han luchado desde hace décadas, tal vez siglos. Unas reconocidas, otras no. Pero lo que esas personas buscan es aportar ideas que permitan a los gobiernos a ver la otra cara de la moneda, para tener una visión más clara que permita reestructurar las cosas, construir una sociedad mejor, más justa y equitativa, donde todos tengan mejores oportunidades de construir una vida mejor. Eso es lo que todos queremos en el fondo. Ya es tiempo que cada uno ceda algo para que todos logremos beneficiarnos.
Recordemos a cada hombre y mujer que entregó mucho de sí y de su tiempo para llevar un mensaje que ayudará a mejorar una parte del mundo y una parte de ellos mismos. Recordemos a Ricardo León, su melodiosa poesía, actitud generosa, espíritu guerrero, contestatario y progresista. Espero que en el lugar donde esté, él se encuentre bien, sonriendo como solía hacer, y su espíritu nos ayudará a emprender esa lucha que necesitamos continuar, para que el progreso y la libertad sea, más que un discurso, una realidad para todos nosotros.
In memoriam
Ricardo León Peña Villa
1962-2011
Por Lucas.